Este martes, funcionarios de la Casa Blanca intentaron calmar este martes el nerviosismo por el rumbo de la inflación, los altos precios y el bajo ritmo de las contrataciones. Brian Deese, director del National Economic Council (NEC), «Consejo Nacional Económico» de la Presidencia y Cecilia Rouse, presidenta del Council of Economic Advisers, «Consejo de Asesores Económicos«, emitieron un memorándum que resalta los avances económicos en medio de la campaña de vacunación.
Estos funcionarios de la Presidencia, en el memorándum, afirman, que el gobierno “está concentrado en la estrategia económica de contener el virus e impulsar la economía… Las cifras más recientes indican que la estrategia está dando resultados”. Pero hasta ahora, la realidad dicta otra situación diferente a esa afirmación.
El texto fue realizado para explicar a funcionarios de la administración del presidente Joe Biden y los congresistas que el American Rescue Plan Act “Plan de Rescate Estadounidense” de 2021, de $1,9 billones de dólares ha fomentado el crecimiento económico y ha creado puestos de trabajo “con remuneraciones justas y condiciones laborales seguras”.
Sin embargo, a la fecha miles de empresas, cerca del 44% de acuerdo a la estimaciones, no encuentran personal para trabajar. Esto se debe según los analistas, que los beneficios por desempleo entregados por el gobierno superan el salario promedio de un trabajador en la mayoría de los sectores, por lo que es poco probable que las personas deseen volver a trabajar en el futuro inmediato.
Esta situación es vista como uno de los diversos elementos que están frenando la recuperación económica que con tal cantidad de recursos inyectados a la economía, debería tener otros números y otros datos totalmente positivos.
Pero, el memorándum, se explica que la nueva propuesta del presidente Biden de invertir $4 billones de dólares en infraestructura y ayuda económica a familias “sentará las bases para un crecimiento sólido y sostenible que durará décadas” en la economía del país.
Desde que el gobierno realizó el anuncio que también entregará entre $250 y $300 dólares adicionales por hijos menores de 17 años a partir de julio, los analistas estiman que se incrementará el monto a personas sin trabajar. De hecho, los economistas han criticado que el gobierno siga ofreciendo subsidios en contra de la estimulación a trabajar.
Y obviamente, millones de estadounidenses han optado por quedarse en casa, recibiendo más dinero, con menos esfuerzo y gastos, que los que habitualmente tienen que hacer en sus empleos. Cómo se recordará, hasta algunas semanas atrás, el gobierno de Biden tenía un enfoque absolutamente optimista sobre la economía, pero tras los datos del empleo, y las continuas quejas de las empresas para encontrar empleados, el discurso se ha moderado.
Join me as I give remarks on the American Jobs Plan. https://t.co/YOj2fLKgwp
— President Biden (@POTUS) May 18, 2021
Ahora Biden y su administración, están enfocados en impulsar el empleo, en medio de un fuerte repunte de los precios al consumidor, que ha encarecido el costo de la vida y que golpearía aún más a los estadounidenses, si no recibieran la ayuda semanal del Plan de Rescate.
Los alimentos han sufrido una subida sin precedentes, en los últimos decenios, por lo que los números de la inflación al cierre de 2021, no lucen nada alentadores. A este escenario, si se incluye la desalentadora tasa de contrataciones en abril, no cabe duda que el escenario económico no pinta nada bien.
No obstante, Deese y Rouse, con este memo hicieron un intento por promover una narrativa más positiva y justificar el inmenso gasto público que ahora, se pretende que sea financiado por aumentos de impuestos a las corporaciones y a los individuos con mayores ingresos.
En cualquier caso, analistas y legisladores siguen siendo críticos con la política de Biden, porque a su juicio el paquete de ayuda económica fue demasiado generoso, además de alimentar la inflación y llevar a muchas personas a abstenerse de aceptar sus antiguos trabajos.
“Los demócratas insistieron en pagarle más a la gente para que no trabaje”, opinó Mitch McConnell, líder de los republicanos en el Senado de Estados Unidos. Una opinión ampliamente compartida por los más acérrimos detractores del gobierno de Biden, así como por algunos demócratas que vaticinan que se podría estar haciendo más daño de lo que se piensa.
“En vez de políticas que reabran la economía de Estados Unidos, los demócratas impusieron a la fuerza políticas que más bien prolongarán partes de esta crisis y eso es lo que ha ocurrido”. Pero el escenario puede complicarse aún más ya que la interrupción en las cadenas de suministro por falta de empleados, contribuyeron al aumento de 0,8% en los precios al consumidor en abril, la mayor alza mensual en más de una década.
Incluso, este mes los temores de una inflación descontrolada se dispararon, luego de observarse un incremento de los problemas causados en algunas cadenas de suministro por el ciberataque contra el oleoducto de la costa este manejado por la Colonial Pipeline Company, junto a la escasez de insumos para reparaciones de viviendas.
Asimismo, hay una escasez de viviendas a la venta en algunos estados, que está impactando el mercado inmobiliario de algunos estados, a lo que habría que sumarle, el temor por las órdenes y regulaciones ejecutivas firmadas por Biden en enero contra la industria del petróleo y sus derivados, provocando un alza del precio del barril de crudo de Texas y por ende de casi todos los precios de los materiales de construcción y de consumo primario.
Con el memorándum elaborado por Deese y Rouse, tratan de enfatizar los aspectos positivos del reporte sobre inflación, como una mayor demanda de restaurantes, hoteles, alquileres de automóviles y pasajes aéreos, posible presagio de que la economía cumplirá con las expectativas de expertos de anotarse un crecimiento de 6% este año, lo que sería el mayor crecimiento económico en casi cuatro décadas.
Here’s the deal: trickle-down economics has never worked.
It’s time to grow the economy from the bottom up and the middle out.
— President Biden (@POTUS) May 18, 2021
Este martes, el presidente Biden, estuvo impulsando una campaña para que los estadounidenses retomen de nuevo la tarea de conseguir empleo y regresen a sus plazas. Por ello, visitó la planta de Ford Motor Company, desde donde habló del empleo y del futuro de la economía estadounidense.
Sin embargo, no todo es tan color de rosas, pues los expertos en economía, así como detractores del gobierno de Biden, afirman que la Casa Blanca es demasiado optimista con sus perspectivas económicas marcadas por el partidismo y medidas de corte populista para cumplir con una agenda de la extrema izquierda en EEUU, que lejos de beneficios frenan la recuperación económica.
Quizás lo único que importan son los datos, y hasta ahora los números no respaldan la visión optimista mostrada desde la Casa Blanca. Sólo resta esperar, para saber en las próximas semanas si el pronóstico resulta ser cierto o si los detractores en realidad aciertan en sus oscuros pronósticos.
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