La situación en todo Estados Unidos es apremiante y las ayudas a los ciudadanos que enfrentan dificultades económicas producto de la pérdida de ingresos o su empleo a causa de la pandemia de coronavirus no paran de llegar. Ahora la ciudad de Los Ángeles ejecutará un programa de emergencia por $103 millones de dólares para ayudar a los inquilinos que no pueden pagar la renta de su vivienda y que afecta también a propietarios que dependen del pago de sus inquilinos para vivir.
Casi 40 millones de personas han solicitado ayudas federales para poder llegar a fin de mes y pagar cuentas, pero en muchos casos la ayuda no ha llegado o simplemente ha sido insuficiente, llevando a muchos estados y ciudades a tomar medidas de protección para apoyar a sus ciudadanos.
La ciudad de Los Ángeles, ha estado consciente de la crisis de los alquileres que vive el estado de California en general, y que ha llevado a muchos residentes a migrar a otros estados con alquileres más baratos. Por ello, Nury Martínez, presidenta del Concejo (la primera latina en ser seleccionada para el puesto) creó por primera vez durante el pasado invierno, un programa de alivio que permitía ayudar con la renta a un grupo de inquilinos durante el periodo de especulación que se suscitó en la ciudad, apenas unos meses antes de que entrara en vigor la polémica ley AB 1482, que limita el aumento del alquiler hasta un 8% por año como máximo en toda California.
La presidenta Martínez presentó en medio de esta situación ocasionada por la pandemia, una legislación para hacer uso de $100 millones de dólares del fondo de la ciudad, que forma parte del paquete federal de recuperación económica Coronavirus Aid, Relief, and Economic Security (CARES) Act, («Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica de Coronavirus«, en español) con la finalidad de crear el programa de emergencia que permita ayudar a los inquilinos de la ciudad en el pago de sus rentas, en un momento en el que, en la ciudad de Los Ángeles el desempleo ha llegado hasta el 20%. Además de esos $100 millones de dólares del (CARES Act), la ciudad disponer de otros $3 millones de dólares que son parte de fondos discrecionales otorgados por del Concejo de la ciudad de Los Ángeles.
En ese sentido la presidenta del Concejo Angelino, declaró: “La gente está desesperada y sufriendo por toda nuestra Ciudad, y la vivienda es su más grande carga”, y añadió: “Estoy particularmente preocupada por los angelinos que están al borde del desamparo, nuestra gente pobre, y aquella que no obtuvo ningún cheque de alivio del gobierno federal”.
Sin embargo, la cantidad de $103 millones de dólares en opinión de la presidenta Martínez todavía se quedará corta, ya que: “es necesaria mucha más ayuda para la vivienda por parte del gobierno federal si queremos mantener a los angelinos en sus hogares cuando la pandemia termine”, por lo que no dudó en señalar: “Continuaremos pidiendo más asistencia al nivel estatal y federal, pero sin duda que estos fondos representan un punto de partida esperanzador”.
La presidenta Martínez, ha recibido mucho apoyo de los habitantes de la ciudad de Los Ángeles debido a que durante el inicio de la pandemia, ella apoyó a los inquilinos que comenzaban a perder sus empleos aprobando una moratoria que hasta ahora está considerada la más robusta de todo Estados Unidos, para detener los desalojos de vivienda de quienes han sido afectados por la crisis ocasionada por el COVID-19.
Según portavoces de la oficina de la presidenta del Concejo de la ciudad de Los Ángeles, en las próximas semanas se pondrá en marcha el nuevo programa de ayuda comenzando aceptar solicitudes de inquilinos afectados por la crisis del COVID-19, aunque por ahora se desconocen los detalles operativos sobre cómo se solicitarán y entregarán los fondos.
Lo que si se conoce hasta ahora, es que los inquilinos residentes de la ciudad que no puedan pagar la renta, tendrán que demostrar que están sin empleo o ganan menos del 80% del ingreso medio del área, debido al coronavirus. Una vez que al inquilino le sean aprobados los fondos de ayuda, los mismos serán destinados directamente al dueño de la propiedad,
Aunque hay una propuesta para dar $1,350 dólares mensuales, lo que está planteado hasta ahora es que estos fondos de ayuda alcancen para pagar dos meses de renta.
Esta ayuda se suman a otras ayudas como Disaster Relief Assistance for Immigrants Project (DRAI), “Proyecto de asistencia de socorro en casos de desastre para inmigrantes” en español que busca ayudar a los inmigrantes que están en una mala situación económica por loa situación actual.
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