Este sábado, el Talibán comenzó hacer la exhibición de cadáveres en las plazas públicas, lo que hace suponer que ese régimen ha vuelto a algunos de los métodos talibanes del pasado, luego que mulá Nooruddin Turabi, advirtiera que volverían las ejecuciones y amputaciones, contemplados en la «sharia«.
El mulá Turabi, fue uno de los fundadores de los talibanes y fue en el pasado régimen Talibán, el encargado de la disciplina ideológica, ya que él era el principal responsable de la aplicación e interpretación estricta de la ley islámica en su gobierno anterior y encargado del Ministerio para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio a finales de la década de 1990.
Por lo que apenas dos días después de las declaraciones del mulá Turabi a The Associated Press, en donde informó que volverían las ejecuciones el Talibán, se colgaron cuatro cadáveres de grúas en plazas principales de Afganistán, que correspondía supuestamente a personas involucradas en un secuestro.
Testigos del macabro acto, en la plaza de ciudad Herat, dijo que insurgentes explicaron que los hombres fueron capturados participando en un secuestro y que la policía los mató. Sin embargo, no quedó claro de inmediato si las cuatro personas fallecieron durante un procedimiento que terminó en balacera con las autoridades o después de su detención.
En cualquier caso, aunque el régimen Talibán no realizó comentarios al respecto, el vicegobernador de Herat, Mawlawi Shir Ahmad Muhajir, dijo que la exposición de los cadáveres en varias plazas públicas era «una lección de que el secuestro no será tolerado«.
Esta extrema medida forma parte de la penalidad inserta en la ley islámica, la «sharia«, que es una serie de códigos de convivencia en sociedad bajo la ideología musulmana que a la luz de los derechos humanos de hoy, se exceden en el uso de la fuerza.
Vale resaltar, que el mulá Turabi ya había adelantado, que estas ejecuciones y amputaciones de manos, podrían no ser públicas, por lo que es posible que las cifras de este tipo acciones, podrían entrar en el oscurantismo. Pero, quizás sea una medida que busca suavizar la dureza de la «sharia» que aplican los talibanes .
Y es que desde que los talibanes tomaron la capital, Kabul, el 15 de agosto y se hicieron con el control del país, tanto los afganos como la comunidad internacional han estado atentos a lo que podrían hacer los talibanes con respecto a las leyes islámicas y su aplicación, que generaron terror durante la etapa anterior.
Muchos opinan que los líderes ideológicos del grupo siguen aferrados a una visión del mundo profundamente conservadora, pero con varios siglos de atraso con respecto a cómo han evolucionado los Derechos Humanos.
De hecho, el propio mulá Turabi dijo que la Ley «sharia» y la disciplina que imparte, nunca debió ser criticada en el pasado y pidió que los países en esta oportunidad no interfieran. «Todo el mundo nos criticaba por los castigos en los estadios, pero nosotros jamás los criticamos a ellos por sus leyes o sus castigos«, comentó el mulá.
«Nadie nos va a decir cuáles leyes debemos tener. Seguiremos los lineamientos del islam y nuestras leyes estarán basadas en el Corán«.
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