Este sábado en la noche, desde Wilmington, Delaware, la vicepresidenta electa Kamala Harris y el presidente electo Joe Biden, ofrecieron sendos discursos agradeciendo al pueblo estadounidense su voto, y además dando garantías que gobernarán para todos los ciudadanos.
A new day in America has come. Tune in as Vice President-Elect @KamalaHarris and I address the nation. https://t.co/d38F58DHu8
— Joe Biden (@JoeBiden) November 8, 2020
La noche inició con Harris elegantemente vestida de blanco, como las sufragistas, el mismo año en el que se cumplió el centenario del derecho de las mujeres a votar en Estados Unidos. Además sostuvo que no habría llegado a donde está, si no fuera por esas mujeres activistas.
Además la vicepresidenta, señaló que está allí gracias al esfuerzo de las millones de mujeres estadounidenses que participaron en las elecciones este año y agradeció a los estadounidenses haber votado por «la esperanza, la unidad, la decencia, la ciencia y la verdad», para dar pie a «un nuevo día» en el país.
Además Harris dijo que: «Aunque puede que yo vaya a ser la primera mujer en este cargo, no seré la última. Porque cada niña pequeña que nos está viendo esta noche ve que este es un país de posibilidades«.
Asimismo, la vicepresidenta en su primer discurso, homenajeó a las «generaciones de mujeres, mujeres negras, asiáticas, blancas, latinas y nativas estadounidenses de toda la historia, que han abierto el camino para el momento de esta noche«.
Y agregó: «Mujeres que lucharon y sacrificaron tanto por la igualdad, la libertad y la justicia para todos, incluidas las mujeres negras, a las que a menudo no se tiene en cuenta, pero que a menudo demuestran que son la columna vertebral de nuestra democracia«.
Al comienzo de sus palabras, citó al líder del movimiento de los derechos civiles John Lewis, fallecido este año: «La democracia no es un estado, es un acto«, y la usó para reflexionar sobre la «lucha y el sacrificio» que supone «proteger» esa forma de Gobierno y lo importante que es.
La vicepresidenta electa, dio su discurso justo antes de la intervención del presidente electo de EEUU, Biden, a quién le agradeció el haber «tenido la audacia» de «elegir a una mujer como su vicepresidenta«.
«Intentaré ser la vicepresidenta que Joe Biden fue para el presidente (Barack) Obama: leal, honesta y preparada, despertándome cada día pensando en ustedes y sus familias«, garantizó la vicepresidenta Harris.
El logro de Harris es admirable, pues hizo historia como la primera mujer negra y la primera mujer asiáticoamericana hija de inmigrantes en ser elegida vicepresidenta. Por ello, la vicepresidenta Harris, dedicó un mensaje para todos los niños del país, independientemente de su género.
Al respecto la vicepresidenta dijo: «Sueñen con ambición, lideren con convicción, y atrévanse a mirarse a sí mismos de una forma en la que otros no les han visto, simplemente porque nunca lo han visto antes«.
Harris dijo: «Si bien puedo ser la primera mujer en esta oficina, no seré la última», dijo. «Porque cada niña que mira esta noche ve que este es un país de posibilidades«.
Eso es algo destacable, porque ella ha demostrado que cualquier ciudadano estadounidense, aunque sus padres sean inmigrantes, puede y tiene todo el derecho de llegar hasta donde ha llegado hoy la aún senadora demócrata por California.
Harris se comprometió a trabajar «para salvar vidas y derrotar la pandemia«, para reconstruir la economía y combatir la crisis climática, y para «eliminar de raíz el racismo sistémico en el sistema de justicia y la sociedad» del país, un clamor de las protestas de este año en Estados Unidos.
Harris al final dijo: «Hemos elegido un presidente que representa lo mejor de nosotros«, dijo Harris. «Un líder que el mundo respetará y que nuestros niños pueden admirar. Un comandante en jefe que respetará a nuestras tropas y mantendrá a nuestro país seguro. Y un presidente para todos los estadounidenses«.
Por su parte, Biden, habló a los estadounidenses cómo el presidente 46 de los Estados Unidos, en un tono conciliador y con un mensaje llamando a la unificación del país, pidiéndoles que se unan y se sanen las heridas que hoy dividen al país «este es el momento de sanar en Estados Unidos«.
Luego, agregó «Hemos ganado con la mayor cantidad de votos emitidos para una candidatura presidencial … y estamos viendo en toda esta nación, y en todas las ciudades en todas partes del país, de hecho en todo el mundo, una efusión de alegría«.
El presidente electo se acercó a los votantes que apoyaban al presidente Donald J. Trump, y les dijo a la multitud de simpatizantes: «No son nuestros enemigos. Son estadounidenses«.
Además, añadió: «Trabajaré para ser un presidente que no busca dividir sino unificar. No veré estados rojos y estados azules, siempre veré Estados Unidos«.
Mientras este mensaje unificador era difundido por los medios, todavía resonaba entre los seguidores del presidente Trump la negativa del mandatario a aceptar los resultados de las elecciones, con tweet donde horas antes había dicho que: «¡ganó esta elección, por mucho!»
Trump y su campaña han presentado demandas en media docena de estados muy disputados esta semana, buscando crear la ilusión de que la votación estaba contaminada y que la victoria de Biden es ilegítima.
Hasta ahora, los expertos legales en materia electoral y constitucional, han desestimado las demandas introducidas por la campaña de los republicanos, por considerarlas infundadas.
El discurso de Biden, no se refirió de forma despectiva hacia el presidente Trump o hizo alusión a su mandato, sólo se refirió a Trump, para extender una la rama de olivo en señal de Paz, a los partidarios del presidente.
«Para aquellos que votaron por el presidente Trump, entiendo su decepción esta noche«, dijo. «Yo mismo he perdido un par de elecciones. Pero ahora, démosnos una oportunidad«.
«Que esta sombría era de demonización en Estados Unidos comience a terminar, aquí y ahora«, añadió Biden, que es una persona profundamente religiosa.
Esta fue la única mención que hizo del mandatario, lo cual en sí demostró que lejos de buscar una profundización de la división entre estadounidenses, prefiere que unir a la nación para sacarla de la fuerte polarización que atraviesa el país y que ha llegado incluso a dividir familias enteras.
A pesar de lo que diga la campaña del presidente Trump, Biden logró su victoria este sábado, tras lograr sumar a una ventaja irreversible en los conteos que continuarán este domingo.
La victoria de Pensilvania, le otorgó los 20 votos que necesitaba Biden del colegio electoral del estado empujaron su total por encima del umbral de 270 votos necesarios para ganar.
Más tarde en el día del sábado, NBC News y AP, también proyectaron que Biden ganaría Nevada, agregando seis votos adicionales del Colegio Electoral a su columna.
Biden dijo que su primera prioridad será controlar la creciente pandemia de coronavirus. Los nuevos casos diarios han eclipsado los 100,000 en los últimos días. Las hospitalizaciones y las muertes también están aumentando.
Es probable que tras la fiesta de este sábado en las calles de Estados Unidos, este número de contagios sea superado debido a que por la euforia del momento, muchos estaban en lugares tumultuosos sin mascarilla.
«El lunes, nombraré a un grupo de científicos y expertos líderes como asesores de transición para ayudar a tomar el plan COVID de Biden-Harris y convertirlo en un plan de acción que comienza el 20 de enero de 2021. Ese plan se construirá sobre la base de ciencia. Se construirá a partir de la compasión, la empatía y la preocupación«, dijo Biden.
«No escatimaré esfuerzos, ni compromisos, para revertir esta pandemia«.
Tanto Harris como Biden reconocieron la gravedad del trabajo que tienen por delante. No será fácil, dijeron, pero están listos.
El discurso de Biden concluyó con una visión elevada de la nación que está preparado para liderar durante los próximos cuatro años. «Siempre estamos mirando hacia adelante, hacia un Estados Unidos más libre y más justo«, dijo.
«Adelante a un Estados Unidos que crea empleos con dignidad y respeto. Adelante a un Estados Unidos que cura enfermedades, como el cáncer y el Alzheimer. Adelante a un Estados Unidos que nunca deja a nadie atrás. Adelante a un Estados Unidos que nunca se rinde, nunca se rinde«.
«Esta es una gran nación. Y somos una buena gente«.
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